LAS CORRALAS

Las corralas (en la fotografía una de la Rivera de Curtidores) son madrileñas por los cuatro costados. Las primeras se empezaron a construir en los siglos XVI y XVII y se generalizaron en el XIX para absorber la fuerte inmigración que llegaba del campo. Disponen de un patio con corredores por el que se accede a las viviendas, unas exteriores y otras interiores llamadas cuartos, y todas con una superficie no superior a los 30 metros cuadrados. En origen no contaban más que de un retrete común por planta, situado al final del corredor. Aún quedan en la zona de Lavapies, Embajadores o el Rastro, pero también en otros barrios populares como Maravillas, Tetuán, Vallecas o Carabanchel