Entre la calle de San Bernardo y la plaza de los Mostenses transcurre Antonio Grilo. Ya en 1776 apareció un apuñalado en la calle, y siguiendo el reguero de sangre se descubrió a un sacerdote refugiado en la parroquia de San Sebastián, en la calle de Atocha. El hombre muerto lo había descubierto rondando a una muchacha de la que se había enamorado.
La casa rotulada con el número 3 (en la fotografía) es la "casa maldita". En 1945 unos ladrones mataron al camisero del primero; el más sonado de los crímenes sucedió el 1 de mayo de 1963, cuando el sastre José María Ruiz mató a su mujer y a sus cinco hijos antes de pegarse un tiro, al parecer obligado por unos extraterrestres que le tenían dominado, y, un año después, la vecina del tercero estranguló a su bebé y la policía lo encontró en un cajón del armario