Lo que hoy es barrio de Chamberí, hasta bien entrado el siglo XIX era sólo terreno de eriales y basureros, con algunos caminos, ya desaparecidos como el del Zarzal y la vereda de Postas. Otros se han convertido en calles importantes del distrito: la antigua carretera Mala de Francia, camino también al pueblo de Fuencarral, es la actual calle de Bravo Murillo; otro camino al pueblo de Fuencarral discurría por la calle de ese mismo nombre, y se unía al anterior en la hoy glorieta de Quevedo; el camino de Alcovendas pasaba por San Bernardo, el de Hortaleza por Santa Engracia, el de Areneros es ahora la calle de Alberto Aguilera, y el de Aceiteros, que partía de San Bernardo por la hoy calle de Magallanes y bordeaba los antiguos cementerios de Chamberi, llegaba hasta más del en nuestros días paseo de San Francisco de Sales.
El aspecto desolador que ofrecía la zona hizo que el Ayuntamiento, hacia 1833, decidiera la creación de varios paseos arbolados para sanear la zona extramuros: el de las Navas de Tolosa constituye en la actualidad la prolongación de la calle de San Bernardo; el Real, la prolongación de Fuencarral; el de Luchana conserva el nombre y era el camino a Hortaleza, al enlazar con Santa Engracia; el de Chamberí pasó a ser la calle de Santa Engracia, y el Novelesco, nombre muy propio de la época romántica en la que se abrió, que luego cambió de nombre por el del Obelisco, por terminar frente a este monumento conmemorativo del nacimiento de de Isabel II que se alzaba donde ahora la estatua de Castelar, es el actual paseo del General Martínez Campos.
Posteriormente se abrieron otros. El del Cine (en la fotografía, en 1930), hoy de Eduardo Dato, se llamaba así por terminar en la Castellana, y donde se alza el paso elevado estuvo la Fuente del Cisne, que provenía del claustro del derribado convento de San Felipe el Real, en la calle Mayor. También el de La Habana, ahora Eloy Gonzalo; el del Huevo, que es la calle de Almagro, y el Paseo Nuevo de las Delicias de la Princesa , bautizado así en honor a la princesa Isabel, futura Isabel II), que es el actual Paseo de la Castellana.
Se plantaron más de dos mil ochocientos árboles en dichos paseos y en el antiguo de Ronda (Sagasta y Carranza) entre acacias, olmos, plátanos, cinamomos, ailantos, sóforas y árboles del paraíso