La calle del Lazo se encuentra situada entre las de la Independencia y de la Unión, a pocos pasos del Teatro Real. Cuenta la leyenda que el rey Alfonso X El Sabio, además de su amor por el arte, el derecho y la ciencia, tenía una pasión desenfrenada por las mujeres. Aunque fruto de su matrimonio con Violante de Aragón nacieron once hijos, fuera de esta relación tuvo alguno más. Una de sus amantes fue María Delanda, vecina de la calle del Espejo, que pasó a la leyenda por su traición amorosa al rey. Prendado Alfonso por su belleza, decidió regalarle un lazo de oro para que lo luciera en sus citas reales. Un día el rey salió preocupado de la casa de su amada porque ella no llevaba el lazo. Se temía lo peor, como así fue, y pensó que la corona no le iba a caber con los cuernos. Una noche se encontró a un joven cosido a puñaladas en un callejón cercano, Llevaba entre sus manos el lazo del rey. Desde entonces aquel callejón recibe el nombre de calle del Lazo para recordar aquel trágico suceso