En el paseo de Recoletos, esquina a Salustiano Olózaga, se encuentra el Palacio del Marqués de Salamanca, obra de estilo clasicista italianizante realizada por Narciso Pascual y Colomer entre 1846 y 1855. Luego fue ampliándose en varias ocasiones y por diferentes arquitectos. Fue este palacio teatro del esplendor del fastuoso, audaz y pródigo financiero José de Salamanca, impulsor del barrio de Salamanca y de numerosos negocios en sectores como el ferroviario, la construcción, la banca o la inversión bursátil. Aunque probablemente llegó a poseer en sus mejores momentos la mayor fortuna de España, murió pobre con una deuda de más de seis millones de reales. El palacio es propiedad ahora de una entidad bancaria