En la calle Carretas se recuerda con nostalgia el viejo café y botillería de Pombo, en la esquina con el callejón de San Ricardo, donde tenía su famosa tertulia (La Sagrada Cripta del Pombo) el escritor don Ramón Gómez de la Serna, Ramón, inmortalizada en un cuadro de Solana. Hoy, un frío y funcional edificio de la Comunidad, la Consejería de Presidencia, de una fealdad imposible de superar, mancilla la memoria de tan añorado y "sacrosanto" local. Era conocido también como el "café de los cagones" por los sorbetes de arroz, especialidad de la casa, con los cuales, se trataba de evitar o curar las famosas diarreas de verano. Posiblemente estaba abierto desde principios del siglo XIX y cerró en 1942 En los últimos tiempos fue un lugar lugar sórdido y prostibulario de la noche madrileña